Cómo Reproducir Plantas Aromáticas por Esquejes en Casa

reproducir plantar aromáticas por esquejes en casa

Las plantas aromáticas son una alegría para los sentidos: aportan sabor a nuestras comidas, embellecen el espacio y atraen insectos beneficiosos. Cultivarlas en casa es una experiencia muy gratificante, y si además puedes multiplicarlas sin coste, ¡mejor que mejor!

Por suerte, muchas de estas especies se reproducen fácilmente por esquejes, una técnica sencilla y efectiva para ampliar tu colección sin necesidad de comprar más plantas. En este tutorial te mostramos paso a paso cómo hacerlo desde casa.

¿Qué son los Esquejes?

Los esquejes son fragmentos de tallo que se separan de la planta madre con la intención de generar una nueva planta completa. Al colocarlos en condiciones adecuadas, estos tallos desarrollan raíces y comienzan a crecer de forma independiente.

Esta técnica es especialmente útil para plantas aromáticas, ya que mantiene todas las características de la planta original y nos permite obtener clones genéticamente idénticos. Es un método muy utilizado en jardinería doméstica porque no requiere materiales complicados y ofrece resultados rápidos con un mínimo esfuerzo.

A la hora de sacar esquejes, éstos pueden enraizarse tanto en agua como directamente en sustrato, dándonos en pocas semanas nuevas plantas listas para prosperar.

Cómo reproducir esquejes

Antes de empezar

  • Busca una planta madre que esté sana. Las plantas más recomendables a la hora se sacar esquejes son: albahaca, romero, menta, savia, orégano, tomillo y hierbabuena.
  • Ten a mano unas tijeras limpias y bien afiladas, un vaso con agua limpia o una maceta pequeña con sustrato ligero y húmedo.
  • Utiliza canela en polvo, de manera opcional, para prevenir la aparición de hongos.
  • Trabaja en un lugar cálido y luminoso (sin sol directo), con una temperatura alrededor de unos 20ºC para reducir el estrés de la planta.

Paso a paso para reproducir plantas aromáticas por esquejes

1º Selecciona y corta el esqueje adecuado. Elije un tallo sano y joven que tenga entre unos 10 – 15 cm. Éste debe ser flexible, sin flores ni signos de enfermedad, una vez seleccionado córtalo justo por debajo del nudo (el lugar donde brotan las hojas).

2º Prepara el esqueje. Retira las hojas inferiores del tallo dejando solo las de la parte superior. Si hay flores, quítalas también ya que queremos que la planta concentre su energía en sacar raíces y no en florecer.

3º Enraiza en agua o en tierra. Coloca el esqueje directamente en un vaso de agua o en una maceta con tierra húmeda. Si decides hacerlo en agua, cámbiala cada 2 -3 días para evitar bacterias. Si por el contrario prefieres colocar los esquejes en una maceta, plántalos con sustrato ligero y húmedo, pero sin encharcar. Finalmente, tanto si has decido hacerlo en agua o en tierra, coloca los esquejes en un lugar luminoso sin sol directo.

4º Espera a que broten las raíces. Tras haber pasado 1 – 3 semanas, dependiendo de la planta, verás que empiezan a aparecer raíces blancas y finas. Si colocaste tus esquejes en agua, espera a que las raíces midan uno 3 – 4 cm antes de trasplantar. Si por el contrario, los colocaste en una maceta, notarás que éstos empiezan a crecer de forma independiente.

5º Trasplanta y cuida tu nueva planta aromática. Una vez el esqueje tenga buenas raíces, plántalo en su lugar definitivo. Riega con suavidad y colócalo en una zona con buena luz indirecta. Pronto comenzará a crecer y ramificarse.

Consejos para que tus esquejes tengan éxito

A la hora de trabajar con esquejes, hay algunas claves que pueden marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso. Por ejemplo:

  • No te limites a hacer un solo esqueje, prepara varios a la vez, esto aumentará tus probabilidades de obtener plantas viables, ya que no todos desarrollan raíces.
  • Ten paciencia, algunas especies necesitas más tiempo que otras.
  • Mantén un equilibro a la hora de regar tu esquejes. Aunque éstos necesitan humedad constante, el exceso de agua puede provocar pudrición en la base del tallo. Una buena ventilación y evitar encharcamientos son esenciales para que el ambiente sea saludable.
  • Otro punto a tener muy en cuenta, es mantener las herramientas con las que trabajes limpias y desinfectadas. Esto evitará la transmisión de enfermedades de una planta a otra, algo especialmente relevante si trabajamos con varias especies.
  • Finalmente, ten presente que cada planta es un mundo. Observa cómo responde tu esqueje a las condiciones y ajusta la ubicación, el riego o el tipo de sustrato si es necesario.
  • La mayoría de plantas funcionarán mejor si haces los esquejes en Otoño o Invierno, cuando tiene menor actividad.

¿Por qué elegir la reproducción por esquejes?

La reproducción por esquejes no solo es una técnica accesible y económica, sino que también ofrece ventajas únicas frente a otros métodos como la siembra por semillas. Pues al reproducir una planta por esquejes, obtenemos una copia genética idéntica de la planta madre, lo que nos garantiza que nuestra nueva planta adquiera cualidades como el sabor, aroma o resistencia de la planta madre. Un aspecto bastante valioso, sobre todo en plantas aromáticas, dónde esas características pueden variar de una planta a otra.

Además, los esquejes suelen crecer mucho mas rápido que las plántulas, lo que significa que en mucho menos tiempo podemos disfrutar de nuevas plantas listas para cosechar. Y aunque como hemos mencionado las plantas aromáticas son ideales para este tipo de reproducción, existen otras muchas como la lavanda, el geranio, la hortensia o el pothos que también responden muy bien al enraizamiento por esqueje.

Incluso algunas plantas de interior como la monstera o el ficus se propagan con éxito mediante esta técnica, abriéndonos un abanico de posibilidades para multiplicar nuestras plantas favoritas sin coste y con un toque personal, adaptado a lo que ya tenemos en casa.